En Rusia, normalmente se utiliza la variedad Antonovka. Es una manzana de cosecha tardía, conocida por su sabor ácido.
Solían crecer en casi todos los patios, y su inconfundible sabor aún forma parte de la infancia de muchos. Firmes, jugosas y con carácter, eran ideales para cocinar.
Inspirados en esa tradición, viajamos a Neuquén y Río Negro para encontrar las variedades de manzanas más adecuadas para nuestra pastilá.
Usamos las mejores manzanas del sur argentino. Seleccionamos cuidadosamente variedades locales para lograr el equilibrio perfecto entre acidez, dulzura y aroma. Así, cada bocado de nuestra pastilá conserva el espíritu de la receta tradicional rusa, pero con un sabor único.